Nota de Prensa
Indígenas Wayuu y afrodescendientes exigen a la minera Anglo American retornar el agua al Arroyo Bruno desviado para la extracción de carbón.
El 5 de mayo de 2020, Anglo American, una empresa multinacional minera (MNC por sus siglas en inglés) que cotiza en la bolsa de Londres celebrará su AGA a puertas cerradas. Anglo American es una de las tres MNC que son dueñas de la mina de carbón a cielo abierto Carbones de Cerrejón (Cerrejón) en La Guajira, en el norte de Colombia.
Las comunidades cercanas a Cerrejón han luchado en los tribunales para impedir la destrucción de sus ríos. Al menos 19 ríos y llanuras aluviales se han visto impactados por la mina. En un área que sufre por la sequía, la mina de Cerrejón utiliza 16 millones de litros de agua al día.
La disposición gubernamental de confinamiento se emitió entre profundas desigualdades. Las comunidades indígenas y afrocolombianas se enfrentan a esta pandemia sin agua, sin alimentos y sin las garantías mínimas para su subsistencia. La crisis humanitaria preexistente se ha visto exacerbada por el COVID-19.
El desafío principal de las comunidades durante esta pandemia del coronavirus es el acceso allegal constante para defender sus derechos, las comunidades circundantes a la mina Cerrejón, y las que han sido reubicadas a otras zonas, batallan para satisfacer sus necesidades básicas. Las fuentes de agua de la comunidad han sido cortadas, obligando a las comunidades a depender de lo poco que les da la empresa. Conforme el COVID-19 afecta cada vez más a Colombia, la falta de acceso a alimentos y agua limpia se está convirtiendo para estas comunidades en confinamiento en cuestión de vida o muerte.
“El carbón no es un derecho humano, podemos vivir sin la explotación de carbón, pero no podemos vivir sin agua y sin cultura”.
Luis Misael Socarras, Fuerza de Mujeres Wayuu
Lo que las comunidades wayuu y afro-Colombian exigen es que la empresa deje que las aguas de sus ríos y arroyos fluyan libremente a lo largo de su cauce natural. Debido a que son sagrados y proveen bienestar – son fuentes de agua potable, practicas culturales, cultivos y lavado. En el Marco de la Sentencia de la Corte Constitucional, las comunidades están haciendo una llamada urgente de retirar el tapón que mantiene este desvió para las aguas del Arroyo Bruno retornen a su cauce natural.
Luisa Rodriguez, investigadora, CINEP.
Aunque Cerrejón apoya la distribución del agua y ayudas humanitarias, la negación del derecho al agua de las comunidades en primer lugar hace que éstas dependan aún más de las ayudas. En lugar de tener acceso al agua limpia de los ríos principales y sus afluentes, el agua tiene que distribuirse de manera manual a las comunidades confinadas.
“El agua es un derecho humano y esencial en la cosmovisión de la cultura tradicional Wayuú. Defender los ríos, el agua, el territorio es una práctica que le ha costado la vida a los líderes indígenas que protestan contra la mina. Han sido amenazados y asesinados y esto es totalmente inaceptable.”
Carlos Mejía, Director Ejecutivo de Oxfam Colombia
Con total desconsideración por la salud de las comunidades y de sus trabajadores, Cerrejón anunció que reanudará sus operaciones el 27 de abril, aunque el COVID-19 todavía no ha llegado a su punto más grave en Colombia: el gobierno le ha ordenado a la población que se confine hasta el 11 de mayo. Cerrejón también va a traer a personas de fuera de La Guajira para seguir con sus actividades mineras. Esto va a exponer a las comunidades indígenas y afrocolombianas y a los trabajadores locales, con poco acceso a los centros de salud, al virus COVID-19.
La protección de los ríos de las comunidades no han sido prioridad ni de las autoridades locales ni de la mina Cerrejón. Cada vez hay más sentencias de la Corte Constitucional y los tribunales locales, en las que se sanciona a Cerrejón por los daños causados al ambiente, a la salud, a la alimentación, al agua, al territorio. Sin embargo, Cerrejón incumple continuamente.
Para organizer entrevistas contactar a: Louise Winstanley, ABColombia Programme and Advocacy Manager on: Mobile +44 7920886874 o, WhatsApp +44 7920886874 Email: lwinstanley@abcolombia.org.uk
Notes:
- Luisa Rodriguez Gaitán, Investigadora y asesora de Incidencia de la Línea de Interculturalidad del CINEP/Programa por la Paz. Hace más de 5 años ha acompañado en formación, investigación e incidencia a comunidades wayuu y afro afectadas por la minería a cielo abierto en el Sur de La Guajira
- , líder Wayuu de la comunidad La Gran arada y coordinador de agua y ambiente de movimiento Fuerza de Mujeres Wayuu. Fue uno de los demandantes en el caso de Arroyo Bruno y la acción contra el licenciamiento ambiental del Carbones de Cerrejón.
- Carlos Mejia, Director Ejecutivo de Oxfam Colombia, durante más de 25 años ha estado trabajando en temas humanitarios y de desarrollo, liderando programas y equipos en todo el mundo.
- ABColombia ABColombia es un proyecto de incidencia política de cinco agencias británicas e irlandesas con programas en Colombia: CAFOD, Christian Aid UKI, Oxfam GB, SCIAF y Trócaire. Amnistía Internacional y Brigadas Internacional de Paz (PBI) son observadores. El acrónimo ABColombia abrevia “Agencias Británicas e Irlandesas trabajando en Colombia. ABColombia tiene casi 100 copartes en Colombia, incluyendo a CINEP. www.abcolombia.org.uk
- CINEP (El Centro de Investigación y Educación Popular) nace en 1972 como una fundación sin ánimo de lucro con una mirada crítica y alternativa de la realidad colombiana. Se fundamenta en la producción sistemática de información, en la reflexión con rigor investigativo, en las propuestas de educación popular para el fortalecimiento de las organizaciones y las comunidades, y en una acción de incidencia intencionada en lo público. Desde una opción preferencial por las comunidades excluidas y víctimas, en particular aquellas a las que no se les reconocen ni respetan sus derechos fundamentales, el centro anima el cambio social a partir de las orientaciones de la Compañía de Jesús en Colombia.
Further Information
Carbones de Cerrejón es una de las minas de carbón a cielo abierto más grandes del mundo y cubre una superficie de 69,000 hectáreas de tierra en medio del territorio indígena Wayuu y el territorio de las comunidades campesinas afrocolombianas. Estas comunidades han estado luchando durante años contra la reubicación forzada, problemas de salud, degradación ambiental y destrucción de sus ríos supuestamente causados por la mina. Entre 2010 y 2018, más de 4,770 menores indígenas en La Guajira murieron de desnutrición, pero Cerrejón en un año ‘lento’ (2017) obtuvo una ganancia de seis mil millones de pesos colombianos.